VPK es un programa aquí en la Florida para esos niños que justo no logran entrar en la escuela, ya que cumplen 5 años después del 1 de septiembre y para no hacerlos esperar todo un año, pueden inscribirse en el pre kínder voluntario. Kung Fu Baby Boy es uno de esos niños y debo decir que la transición ha sido bastante fácil.
Kung Fu Baby Boy empezó VPK (Voluntary Pre Kinder) en la misma guardería a la que ha ido por más de dos años. Oficialmente empezó a mediados de Agosto, pero en realidad lo habían cambiado a ese salón con los niños que empezarían Kinder con el nuevo año escolar; más o menos en Mayo, porque él ya estaba muy grande para quedarse con los niños de 3 años.
Como el VPK es en la misma guardería, pues muchas de la reglas son las misma: el colchoncito para la siesta, no llevar juguetes al salón, en fin, esas pequeñas cosas que hacen que todo marche mejor y no haya malos entendidos; sin embargo, ahora que está en la clase de los niños más grandes, tienen actividades que giran en torno a un tema central, éste mes era la letra M, las partes del cuerpo y los diferentes tipos de familias.
La primera semana, cuando estaba agarrando las cosas para salir a llevarlo a la escuela, Kung Fu Baby Boy me dice que tiene que llevar algo que empiece con la letra ‘M’ (¡Como me acordé de mi madre y de lo que la hacíamos correr a última hora!)… Por suerte teníamos a la mano un Monster Truck y eso fue lo que llevó.
Varios días pasaron y él tenía en el carro unos carritos, los cuales quiso bajar una vez que llegamos a la guardería. Le dije que no y que los dejara en el carro; me volvió a decir que los tenía que bajar, le repetí que no, por tercera vez me volvió a insistir y ya un tanto malhumorada obligué a que dejara los carritos.
Se bajó con la cabeza agachada y la verdad que me sentí mal. Lo llevé a su salón y mientras nos despedíamos uno de sus compañeritos entró con un juguete, que empezaba con M; a Kung Fu Baby Boy se le llenaron los ojitos de angustia otra vez como queriéndome decir, ¡Viste!, tu no me dejaste traer el mío.
¡Me sentí horrible!
Salí del salón y justo me topé con la directora y le comenté lo que había pasado y me dijo que si, que ellos no pueden traer cosas de la casa, siempre y cuando sean destinada para compartir cuando se sientan en círculo.
¡Salí corriendo a buscarle los carritos!
Cuando llegué de vuelta al salón, ya había llegado su maestra regular y cuando Kung Fu Baby Boy vio los carritos se alegró, porque lo que tenían escrito empezaban con M. y podía compartirlos con sus compañeritos.
Ahí me di cuenta que como padres tenemos que escuchar y no saltar y reaccionar automáticamente para hacer cumplir las reglas al pie de la letra. Me prometí ser más receptiva e indagar un poco más antes de decir ¡NO!. Es fácil imponer autoridad y hacer sentir a los demás que su opinión no vale, pero yo no quiero ser así. Quiero que Kung Fu Baby Boy se sienta cómodo y libre al decirme las cosas, porque cuando la madre es quien no escucha, las cosas funcionan menos.
Adriana Martin says
Muy importante escuchar a los hijos y creer en lo que dicen
Andrea says
¿Y te disculpaste con él?
Maybelline Valenti says
Si Andre, por no haberlo escuchado y él de espectacular como siempre, It’s ok mami… jejejej
Romina Tibytt says
Ayyy May, me encantó este post y me hiciste emocionar…. estuve en esa situación miles de veces, pero si creo que con cada tropiezo se aprende. Importantísimo escuchar y demostrarles que confiamos en ellos, en lo que nos dicen, en lo que entendieron, en todo!
Gracias por la reflexión! Que grande esta Kung Fu Boy!
Diana Rodriguez - Entre Compras y El Hogar says
Si, tienes toda la razón, a veces nos aceleramos, quisas porque estamos ocupados, pero debemos prestarles mas atención.
Felicidades por el VPK es una hermosa epoca de mucho aprendizaje!
Laura Rodriguez says
Maybelline, me hiciste reflexionar. Con el apuro de todos los días siempre se nos pasan ciertas cosas. Me pasa mucho más de lo que quisiera. Gracias!
Gilda Campos says
Muy cierto. Creo que hacer conjeturas es lo peor. Hay que aprender a escuchar. Muy buen post!.
Natalia says
me imagino como te sentiste. La verdad que es muy importante escuchar a los niños.
Teresa Garza says
Me encantan tus posts.. siempre tan espontáneos y con información tan única y honesta.. Mil felicidades de verdad.
Cristina says
May, me ha pasado algo similar y lo que peor me hace sentir es la respuesta noble de mi hija 🙁
Mayra - Estilo Familiar says
Uno a veces tan desesperado y que se cree que se sabe todo y ellos te estaban obedeciendo y cumpliendo con su salón. Que lindo y tu “con el rabo entre las patas” Mil veces me ha pasado lo mismo por prisuda.